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Que este trencito llegue a buen puerto

  • Matías N. Serkin
  • 13 sept 2015
  • 1 Min. de lectura

Después de tantos años de andares irregulares, Ferro volvió a ser cosa seria y se aferró esta tarde a los puestos de reducido. Por la fecha 33 del torneo del Nacional B, recibió a All Boys, que venía en alza.

No fue mucho más el local que el visitante, pero cuando las papas queman, este equipo demostró que pudo y puede anteponerse.

Los roces y la poca claridad estuvieron a la orden del día en la tarde de caballito. La iniciativa la tuvo Ferro. A los 14 Vernetti habilitó a Salmerón, cuando no, y el goleador del Verdolaga puso el uno a cero de cabeza. A partir de la apertura el partido se diluyó, Ferro se dejó estar y pago caro las consecuencias. Por la misma vía empató el conjunto de Romero. González emparejó las cosas tras un tiro de esquina por lo menos polémico. Y se fueron al entretiempo empatados.

A la vuelta del descanso, los protagonistas no cambiaron su postura. Mezquinos los dos, ni Ferro ni All Boys regalaron nada. Pero las ganas y la paciencia estuvieron de un lado y por eso los verdes se llevaron el premio mayor. Lamolina vio penal y sancionó. Otra vez el pelado, esta vez desde los doce pasos.

Todo vale, aunque sea con la mano. Y Ferro quiere hacerse valer. Pensar en el ascenso directo puede ser un exabrupto, pero anda a saber Caballito lo que te espera.

 
 
 

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